Roto y Restaurado, ¡Imposible!.
Mi padre solía comprar todos los días un antiguo accesorio llamado «Periódico».
Este elemento servía para enterarse de las noticias, acontecimientos diarios, y otras cositas.
Mi padre tomaba el periódico, lo leía, y luego empezaba a romperlo en cuadritos de unos quince centímetros.
Luego se dirigía al baño y allí, en un clavito pegado a la pared, colocaba los cuadritos de periódico.
Ahora las cosas han cambiado, y en los baños modernos ya se encuentra otro dispositivo para el mismo fin llamado «Papel Higiénico».
Devolviéndome en el tiempo. Tomaré el «Periódico», que luego de ser partido en cuadritos y con un soplito y mis palabras mágicamente poderosas, «Maguín Maguín», restauraré el periódico roto. (Ver video).